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Todavía nos acordamos del Consejo de Sabios y de la asunción de la deuda histórica de la RTVE por parte del Estado, del nuevo modelo de Corporación y de una financiación estable y suficiente. También nos acordamos de aquellos emotivos momentos con los que todos nos deleitamos viendo un futuro prometedor en el que brillaba la producción propia, en el cual los empleados podrían, por fín, proponer ideas y llevarlas a cabo. ¡Caramba! hasta una nueva sede enfrente del Cuartel General de la OTAN, ni mas ni menos. ¡Que grandes momentos pasamos! y todos pensamos que las ocurrencias de Zapatero y Cia eran reales y confundidos por la sed de tantos años de necedad sucumbimos al espejismo de una televisión pública líder del español en el mundo y mundialmente famosa por su calidad y contenido. Aquellos años felices pasaron y hoy toca bregar con una herencia, mal que nos pese, nuestros "progenitores" se gastaron el dinero en irse de parranda, ahí están disfrutando de las mieles de la máxima audiencia en A3M, cadena con nombre de pegamento y otro se encuentra allende los mares de "Mayami" con sus "beaches", y resultó que dejaron a los empleados, sus hijos, al socaire.

Fuente: El Confidencial

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